Somos conscientes que vivimos en un entorno globalizado y de la enorme competencia y los grandes retos a los que cualquier empresa se enfrenta en el siglo XXI. Sin embargo, no es menos cierto que, hoy más que nunca, precisamos de comportamientos sociales y éticos que van mucho más allá de un mero beneficio empresarial.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son una guía, un mapa que permitirá a las empresas identificar si su impacto social, económico y medioambiental aporta valor a la sociedad, y en consecuencia fortalecer su reputación y sus relaciones con los distintos grupos de interés.
En Sagarmanta, hemos decidido aplicar algunos de los objetivos a nuestro plan de responsabilidad social corporativa y, mediante acciones concretas, ir midiendo resultados para poner nuestro granito de arena para contribuir al Propósito 2030.
Concretamente, los objetivos que vamos a aplicar son: igualdad de género, energía sostenible, industria, innovación e infraestructuras, producción y consumo responsables y acción por el clima. Puedes encontrar toda la información en el siguiente enlace.